Sea para taparle el ojo al macho presidencial.

Sea para simular democracia.

O sea para ganar tiempo tras el pulso del Día Internacional de la Mujer.

Pero hay un dato cierto:

Sigue bajo revisión la candidatura (segura, digo yo) de Félix Salgado Macedonio para gobernador de Guerrero. No está seguro al día de hoy, pero subrayo, ni tampoco fuera de la contienda, se esperará, eso sí, el paso de las olas o si estas crecen darle reversa a su candidatura.

En estos momentos la esperanza para Felix se monta en el posible descenso de la cresta de esta avalancha de mujeres con muchos gritos y uno de ellos el de ¡ningún violador será gobernador! Si baja, si se percibe que baja considerablemente, entonces el gran amigo del titular del Ejecutivo será ratificado y ungido desde el centro del poder.

Ahora, si este escenario se materializará con Félix en la contienda, los mesurados de Morena temen impacto en todos los procesos federales, estatales y municipales, aún en aquellos lugares donde el optimismo oficial ya siente sus reales de dominación y perpetuación.

Publicado en 24 Horas.