Diego Santoy Riveroll, acusado del asesinato en 2006 de dos hermanos de 3 y 7 años de edad en Monterrey, Nuevo León, recibió una sentencia definitiva de 71 años, 7 meses, y 27 días en prisión.

El doble crimen ocurrió el 2 de marzo de 2006 en la casa de su exnovia Erika Peña Coss, ubicada en la calle Monte Casino, en la lujosa colonia Cumbres. 

De acuerdo con los testimonios, Diego (de 21 años)  “enloqueció” cuando Erika le dijo que ya no quería salir con él.  Cubierto con un pasamontañas y guantes de látex, trepó por las paredes del inmueble hasta que logró ingresar a la residencia.

Una vez dentro, se escabulló hasta la habitación de Erika para intentar convencerla de que no lo abandonara; pero ante la negativa de la joven, Diego asesinó a la hermana de  su novia de 3 años de edad, María Fernanda Peña Coss, y a Erick Azur, de 7 años.

Antes de huir, intentó degollar a su ex pareja y secuestró a la empleada doméstica Catalina Bautista; luego robó un coche y se fue de la entidad federativa junto a su hermano.

El caso causó gran asombro en el país, pues en aquel entonces la violencia no era tan común y el tejido social no estaba tan descompuesto como en la actualidad. 

Diego Santoy Riveroll recibió la sentencia este martes por los delitos de homicidio calificado, homicidio calificado en grado de tentativa, robo calificado, y privación ilegal de la libertad en su carácter de secuestro.

De esta forma ‘El Asesino de Cumbres’ pasará la mayor parte de su vida en la cárcel.

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