Por El Marqués de Puerto Marqués.
Acapulco vive actualmente tiempos muy oscuros gracias al gobierno perredista que nos exprime día con día sin producir ningún beneficio para el puerto. Ya que está a la vista de todos los acapulqueños que la ciudad naufraga sin un capitán ni un plan claro que nos haga pensar que hay esperanza para los próximos años en que el aprendiz de Alcalde, Evodio Velázquez, siga haciendo como que nos gobierna.
Para muestra del caos y la mentira que impera en nuestro Ayuntamiento quiero reproducir esto que cita Enrique Castillo González en su columna de opinión del día de hoy del diario El Imparcial de Oaxaca acerca de nuestros flamantes funcionarios:
«Los funcionarios de los gobiernos, estatal (Guerrero) y municipal (Acapulco), trabajarán con vehemencia en el control de daños acerca de algunas historias que saldrán en los próximos días.
¿De qué temas e historias hablo? Van algunos ejemplos.
El jueves pasado, Alejandro González Molina, Secretario Municipal de Turismo, dejaba saber que viajarían a Miami a entrevistarse con una Compañía Naviera y buscando recuperar tres cruceros que habían cancelado ya su visita a Acapulco. Molina puso sal y pimienta al asunto pues agregó: «aprovecharé el viaje para recordarle a los norteamericanos que ellos también tienen ciudades muy peligrosas». Y allá fueron pues funcionarios, políticos y empresarios. En el avión viajaron el Secretario Estatal de Turismo, el alcalde de Acapulco, González Molina, un hombre de la Fiscalía Estatal, un diputado local, un empresario del puerto y la directora del Centro de Atención y Protección al Turismo de Acapulco (CAPTA).
El que Ernesto Rodríguez fuera le daba fuerza a la embajada acapulqueña, claro, es correcta la presencia del ‘aún’ alcalde de Acapulco, incluso se puede entender que viajará también Molina, ése que avisaba que iba a llamarles la atención a los gringos; bueno, se acepta que Covi fuera con ellos, la Directora ciertamente conoce la problemática que hoy vive la Ciudad Puerto, ¡pero!, ver que iban en ese viaje José Aguirre y Ernesto González dibujó en mi añoso rostro un redondeado signo de interrogación: ¿Qué tenían que hacer en ese viaje el propietario de una empresa de montajes para grupos y convenciones y un diputado local, diputado que, espero no equivocarme podría apostar que ni inglés habla?
Hoy leo y veo información en vídeo que da espacio para especular que los resultados de ese viaje a Miami no fueron favorables para Acapulco, Ernesto Rodríguez Escalona que grabo un vídeo en el que explicaba el objetivo de la misión, no habla de la recuperación de los referidos cruceros, es más deja saber que de la empresa dueña de los barcos vendrá a darse una vuelta para hacer algunas anotaciones, no hay imágenes de los embajadores (sic) mexicanos con los gringos, ésos que Enrique Molina iba a regañar. Nada qué reportar a casa…. Queda un poco de veneno en el frasco: ¿quién pagó el viaje del empresario y del legislador?
Otro tema que será parte de la picaresca de la semana. Resulta que no hace muchos días el alcalde Evodio estuvo en la CDMX para hacer saber que requerimos 15 mil millones de pesos para iniciar trabajos de pacificación en Acapulco y agregó, «y eso será solo para invertirse en un año».
El alcalde intentó explicar cómo es que invertiría esos centavos. Junto a él, estaba el diputado Jesús Zambrano, del PRD.
Lo que nos hace revivir el asunto es, que justo hoy, el diputado Ricardo Mejía Berdeja hace saber que, propondrá la creación de un fideicomiso que sea el administrador de los recursos que la federación pueda enviar para los programas esos referidos por Evodio, el diputado de Movimiento Ciudadano no deja de tener él dedo señalando la posibilidad de un mal manejo de los dineros» finaliza Castillo González.
Con esto y otras pruebas que ya hemos publicado, queda demostrado que Evodio y su gente son una pandilla de mentirosos, ya que en su comunicado que mandaron hicieron ver que su viaje a Miami (a costa de nuestro dinero) había sido productivo, cuando fue un derroche innecesario de dinero y tiempo.
Porque la realidad es que Evodio no manda en Acapulco ni tiene control sobre este tipo de problemas, que para lo único que le sirven es para utilizarlos como publicidad y hacer como que si trabaja, al igual que el «higadito» de Alejandro Gonzalez Molina, un personaje que no se cansa de quedar en ridículo ante la opinión pública en cada declaración absurda que hace, como aquella en donde aseguró que este año regresarían los spring breakers al puerto y llegaron menos de 100 estudiantes.
Tiempo al Tiempo.